Visita nuestra web durante 5 minutos y aparecerá aquí un descuento
NUEVOGROWER
Este tipo de inconvenientes se pueden prever y repeler antes de que haga acto de presencia gracias a productos naturales como el Aceite de Neem, quizás es uno de los preventivos más usados por los cultivadores y es gracias a su efecto potente como repelente ante la llegada de insectos, haciendo que estos huyan de nuestras plantas y se vayan a otras. En el caso que hayamos sufrido o creamos que nuestras plantas pueden ser víctimas de ataques de plagas como la oruga, os recomendamos Bacillus Thuringiensis como preventivo, evitará que la oruga se reproduzca y se expanda por todo el cultivo para acabar pudriéndose por completo.
En el exterior es muy común sufrir el ataque de plagas como los pulgones o los ácaros debido a su presencia en casi todos los jardines, como por ejemplo los rosales. Si encontramos signos claros de su presencia, para eliminarlas, debemos hacer uso de insecticidas específicos para matar a esas plagas. En muchas ocasiones, no logramos que los productos se adhieran bien a nuestras hojas, esto hace que dejemos algunas partes de las plantas casi desprotegidas y las plagas no se eliminarán del cultivo. Para evitar esto, cuando usemos un pesticida, insecticida o repelente es recomendable primero usar jabón potásico. Este producto nos ayuda a la fijación en las hojas del agua que fumiguemos y mejora la absorción de los tratamientos que estemos utilizando.
En el caso de que la plaga ya se haya instalado con éxito en nuestro cultivo, hay insecticidas específicos para exterior como Expelex, compuesto de piretrinas y especialmente eficaz contra plagas como la mosca blanca. Si con estos tipos de insecticidas orgánicos y naturales no consigues frenar o eliminar la plaga, es el momento de usar uno químico. Los orgánicos funcionan especialmente bien para cultivos en exterior porque las plagas pueden mudarse a otras plantas, sin embargo en interior, esta tarea es más complicada y en la mayoría de ocasiones debemos usar algún producto químico.
Si nuestras plantas empiezan a mostrar debilidad, el color de sus hojas y tallos empiezan a cambiar, es que nuestro cultivo ha contraído una enfermedad debido a la aparición de hongos. Esta molesta plaga es difícil de eliminar aunque si la detectamos a tiempo y contamos con los productos adecuados podemos llegar a frenar sus síntomas y evitar que siga propagándose por todo el cultivo, pudiendo de esta forma, realizar la cosecha aunque este se vea afectada y reducida.
Lo mejor para intentar evitar la instalación de hongos en nuestras plantas es el propolix. Este fungicida orgánico previene a las plantas de ataques de hongos y mejora su resistencia ante estos. Si en cambio, ya tenemos la enfermedad instaurada en nuestro cultivo, debemos utilizar un fungicida químico siempre y cuando las plantas estén aun en el estado vegetativo. Si desafortunadamente nuestro cultivo se encuentra en la fase de floración y las plantas son adultas, es aconsejable optar por un fungicida orgánico para no producir quemaduras en nuestras plantas. Los hongos más comunes en los cultivos de marihuana son el oidio y el mildiu, en nuestro sección encontrarás fungicidas específicos para prevenir sus ataques y para frenar su avance.
Cuando queremos eficacia y solución a los problemas causados por plagas o enfermedades es mejor hacer uso de plaguicidas e insecticidas químicos.
Es posible que encontremos restos de su composición en el sabor de la marihuana si lo utilizamos al final de la fase de floración, pero a veces, es la única manera de eliminar el avance de trips o arañas rojas en cultivos de interior. Podemos usar los de contacto o choque para tener un efecto inmediato o los sistémicos para que su efecto perdure en nuestras plantas.
En problemas en las plantas encontrarás todos los insecticidas, fungicidas y plaguicidas para poner fin a los problemas con plagas o enfermedades. Si lo que necesitas es prevención, también disponemos de compuestos especialmente eficaces para este aspecto.
